abril 27, 2015

Berrinches de Novelista Novato #44: Pick up the pieces

Remedios Varo (1908 - 1963)
"Niño y Mariposa" (1961)
Óleo sobre masonite, 53 x 30 cm
Colección Particular

Abril ha sido un mes lleno de cosas buenas qué reportar; siempre es bueno recordarme que después de las tormentas llegan las calmas relativas, los instantes donde hay que recargar provisiones, limpiar los armarios y darse cuenta que los equipajes ligeros son los que se llevan a los mejores viajes. Muchas cosas han pasado, una borrachera llena de blackouts en pleno Friday night, un encuentro inesperado en los andenes del gusano naranja, una reconciliación más que necesaria con los dentistas que apunta a convertirse en un wisdom teeth blues y los pequeños descubrimientos en mi terapia psicoanalítica.

Sin embargo, he tenido pocas ganas de leer y de escribir, razón por la cual he comenzado a recopilar mis poemas y frases favoritas en un pequeño cuaderno que deseo tener con los mínimos tachones posibles; cuando se trata de querer escribir algo mío termino garabateando cualquier cosa, frases construidas que terminaron en alguna entrada de este blog y que pasan desapercibidas como ideas que suenan geniales pero que no lo son. Escribir se ha convertido en un regreso a las bases, a reescribir las cosas que me motivan a seguirle el camino a las letras, como si fuera un ejercicio manual de niño de educación básica.

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Abril ha sido el mes de reconstruir mi juego interno y mis convicciones. Algo curioso que me ha dejado es la necesidad de reconstruir memorias bajo circunstancias de descontrol. El viernes antepasado me quedé dormido en un sillón de una casa ajena tras una botella de whisky y momentos de calidad con buenas personas; el lunes siguiente, uno de mis amigos de la prepa me reencontró saliendo del Metro. Lo que tienen en común esas dos situaciones es la necesidad casi instintiva de tratar de asociar recuerdos borrosos y albergados en la profundidad del subconsciente, el cual puede ser traicionero cuando se trata de las descargas de realidad.

Tuve necesidad de escribir todas estas ideas aisladas gracias a la última entrada de Lizzie Lo, la que para mí es la blogger de estilismo más interesante del país (y eso que en México hay una por cada cuadra, un guilty pleasure bloguero que no pienso dejar por el momento); no se trata solo de sus interpretaciones de moda, también admiro la lucidez de sus palabras. En su último post, nos otorga esto: "L'air gets dense... I've run out of freedom. It looks as though it's time for multiple reality checks. The ones I've tried to escape the most. My immediate context for once doesn't seem to be a naive shelter".

Si bien la mujer que escribió esto tiene otra idea, no pude dejar de pensar en la idea de dejar detrás la inocencia en pos de los golpes de la vida; muchos entendemos los retos como algo agresivo y desagradable de comenzar, pero que hay que entender que son esos momentos incómodos los que nos permiten darnos cuenta que la libertad se gana con cada paso y con cada acto. Tener conciencia del aire en nuestros pulmones es un tesoro invaluable, es saberse libre de correr hacia donde uno desee llegar, es aceptar el cambio con una sonrisa para ser alguien mejor, para adentrarse en los misterios de la vida con alegría y con esperanza.

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Sin duda me pasé de cursi, sobre todo en la última parte. Posiblemente mi psicoanalista haya pensado lo mismo una y otra vez; posiblemente eso también sea un síntoma que redunde en mi inocencia funcional. Entre los fragmentos de mi vida que le he presentado, hay varios que desconozco si serán parte de mi imaginario inmediato en el futuro o si tendré que sustituirlos por otros; se insiste que la terapia tendrá que curar algunos traumas, por lo que tendré que deshacerme de pedazos de mis recuerdos. Mucho de lo que le he dicho está aquí; quizás tendré que releer toda la cronología de este espacio con los ojos desvelados por la terapia en los siguientes meses.

De una u otra manera, mi vida privada tiene un poco de pública gracias a este espacio, como toda mentira tiene sus destellos de verdad. Espero tener algo de mis pendientes en línea antes de que termine el mes. Por lo pronto la semana tiene que empezar, pero antes dejaré por aquí una magnífica canción. Buen inicio de semana para todos...

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