Reporte Expo Temporal #13: Víctor Rodríguez, "Normandía"

Víctor Rodríguez (México D.F., 1970)
Detalle de "56 Trapezoid Delphica" (2011)
Acrílico sobre tela, 294 x 198 cm
Colección Privada

El pasado jueves 22 de marzo, Central Art Projects abrió al público la exposición "Normandía" del artista mexicano Víctor Rodríguez (México D.F., 1970), radicado en Nueva York desde 1997, lugar desde donde ha cultivado una gran historia de éxito artístico en la Gran Manzana [1]. La impresión que me llevé al verlo ese día, al entrar a la galería minutos antes de la inauguración, fue la de un irreverente cosmopolita; pálido y esbelto, vestido de cuero negro, un zapato negro y otro blanco, rapado casi por completo, con excepción de su mohawk que partía desde la coronilla hasta la nuca. Es de trato fácil, siempre está bien acompañado, pero tiene un aura que parece alejarlo de cualquier clasificación fácil; por alguna razón, siempre me han fascinado aquellas personas que escapan de cualquier intento de ser descriptibles, y éste hombre es uno de ellos.

Aquella fue una noche más que divertida, y tuve gran oportunidad de conocer a un cúmulo de personajes interesantísimos, como el dealer Óscar López y el artista visual Jean Picazo, a quien estaré siguiéndole la pista por los siguientes meses. Vale la pena decir que Central Art Projects es una galería relativamente joven, pero que ha logrado construir un público asiduo y heterogéneo, además de que ha logrado una posición envidiable en el mercado de los coleccionistas. Héctor Falcón (Culiacán, 1973) es el director de CAP, y además de ser un sobresaliente artista que trabaja con su cuerpo de formas muy transgresoras, ha realizado un trabajo destacado para colocar a esta galería como un escaparate del arte contemporáneo internacional.

Algo me había inquietado en demasía durante la velada, el porqué del nombre de la exposición, a lo que Falcón me sugirió que lo escuchara de Víctor motu proprio: Era un día normal en el estudio de Víctor Rodríguez en Brooklyn cuando un anciano entró de improvisto; el artista había dejado abiertas las puertas del estudio para que el aire entrase y oreara sus lienzos. Aquel hombre observó el trabajo de Víctor, se le acercó y le comentó, "Esto Parece la Batalla de Normandía". Aquel chascarrillo se convirtió en algo más que en un nombre para esta exposición; como los ejércitos aliados en el Día D, Víctor Rodríguez se ha lanzado con cámara, pincel y aerógrafo entre manos, a la reconquista de sus temáticas, de los críticos, de los coleccionistas; toda revisión autocrítica debe derivar siempre en innovación, las ciudades se reconstruyen y son optimizadas para simbolizar cambio y un mejor devenir, y el trabajo de Rodríguez no decepciona en ningún momento.

Inauguración, Marzo 22 de 2012. (Fotografía del Autor)

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Víctor Rodríguez es algo más que un artista genial; detrás de la magia de su afilada mano derecha y del detalle con el que sus claros ojos azules observan el mundo, existe una rigurosa disciplina y una actitud de constante inquietud y autoexploración hacia su trabajo. Su obra, de sorprendente verosimilitud mimética basada en fotografías (fotorrealismo), va más allá del pavoneo caprichoso de su capacidad técnica. Ver uno de sus lienzos es transportarse hacia una instantánea de su vida diaria, en la cual hay una tensión constante entre la realidad que es reproducida y el deseo que involucra siempre el tramado de las ficciones. Las mujeres que retrata en sus lienzos pertenecen a episodios de su vida capturados por su cámara fotográfica, y que son transformadas por su pincel en diosas icónicas para un culto sin dogmas; violentas, altivas, sensuales y orgullosas, como la Leda Atómica daliniana.

Bien me lo hacía ver Óscar López, en Víctor Rodríguez no hay frivolidad, cualidad de la cual han sido acusados artistas hiperrealistas como Santiago Carbonell, ni es un artista cuyo discurso tenga el hermetismo y la oscuridad del de Arturo Rivera. La viveza de los colores de su obra la vuelven empática, atemporal y de una estética accesible para cualquier persona; sería muy difícil que un cuadro de Rivera colgara de las paredes de un lugar que no fuera un museo, pero la obra de Rodríguez sí se presta a esa clase de consumos. Entre los coleccionistas de su obra se encuentran cantantes como Lenny Kravitz y Madonna, así como los dos últimos presidentes demócratas de Estados Unidos, Barack Obama y Bill Clinton.

Uno de los giros que la obra de Víctor Rodríguez ha dado en la última década radica en sus acercamientos técnicos a los gestos de las mujeres que retrata; el lienzo es fragmentado en diferentes regiones (bandas horizontales y verticales, módulos con formas geométricas), las cuales son pintadas con diferentes tratamientos de color: de lo infrarrojo a lo ultravioleta, de las encarnaciones verosímiles a la reproducción unicolor, de la descripción a la insinuación. Como fiel seguidor que es de Chuck Close, el gran campeón del fotorrealismo norteamericano, Rodríguez parece haberse aburrido de sólo reproducir fotografías en lienzo, y se ha lanzado a deconstruir sus imágenes, conservando esa sensación de mímesis engañosa que se ríe de la reproducción técnica y que al mismo tiempo depende de ella.

Víctor Rodríguez (México D.F., 1970)
"Bernini 1 (St. Thèrese) y "White Double" (2011)
Acrílico sobre tela, 198 x 198 cm (ambas)
Colección Privada
Crédito Fotográfico: www.guerotix.com

En los tiempos donde los conceptos de arte y belleza tienden cada vez más a radicalizarse y las hechuras tan jocosamente llamadas académicas ha cedido la preferencia del mercado a figuraciones expresionistas, lenguajes objetuales, transgresiones discursivas y sesudos discursos curatoriales, la obra de Víctor Rodríguez se presenta como una alternativa totalmente moderna, donde no queda de lado una revisión constante de la historia del arte. El artista está consciente, y así lo marca en sus cuadros, de la influencia de artistas como Gian Lorenzo Bernini, Édouard Manet, Andy Warhol, Gerhard Richter y Kenneth Noland. La cultura pop es también una parte muy importante de su trabajo: las referencias a la música de Pink Floyd, los cubos de Rubik, el tarot de Rider y Audrey Hepburn vestida en su Givenchy negro hacen presencia en estas piezas.

Además, los lienzos de Rodríguez también dejan ver soluciones nuevas cuyas raíces podrían estar en otros momentos de la historia de la producción de imágenes en dos planos: "Double White/B&W" y "White Double" (2011) son dos piezas muy interesantes que, desde mi óptica, remiten a dos instantes en la historia de la representación: La primera es reminiscencia a una de las ambiciones de Braque y Picasso en el periodo del Cubismo Analítico, donde se buscaba reproducir diferentes temporalidades en un mismo espacio pictórico; la segunda parece simular el borroneo capturado por el obturador de una cámara cuando un retratado abandona la pose y se mueve, o la doble exposición del mismo negativo en diferente posición sobre la superficie.

Finalmente, el sentido de la vista es esclavo del fenómeno óptico, el cual otorga colores a los objetos frente a nosotros por percepción de un pequeño fragmento del espectro electromagnético. Víctor Rodríguez da colores y tiempos diferentes a lo que vemos, nos cuestiona la rutina con la cual nuestra vista conoce su alrededor; cuestiona también los medios de producción de imágenes, desnudando nuestra vista y los medios que utilizamos para tratar de congelar la realidad.

No se pierdan esta exposición por nada del mundo.

Víctor Rodríguez, "Normandía"

Desde el 22 de marzo hasta el 1º de Junio

Central Art Projects

Gral. León 48, esq. Gral Cano

Col. San Miguel Chapultepec

Estación del metro más cercana: Juanacatlán

Horarios: Lu a Vi, 11 a 15 y 16 a 18 horas

Sábado sólo por cita.   Cerrado en Domingo

Entrada Libre.   Información: info@centralprojects.org

www.centralprojects.org

www.victorrodrigueznyc.com

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1.- Para saber más sobre diferentes creadores que han conquistado Nueva York, pueden leer el siguiente libro: Torre, Wilbert. Todo por una Manzana: Ocho artistas mexicanos que se comieron Nueva York. Jus, 2010. Algunos de los personajes que se manejan en este libro son la directora  de orquesta Alondra de la Parra, el arquitecto Enrique Norten y el comediante Eugenio Derbez. Agradezco la recomendación a mi colega A.L.S.