IN MEMORIAM: Miguel Calero (1971 - 2012)
El fenómeno del Campeón, Duvier Riascos (Notimex) |
Se nos fue la primera temporada de la maquillada y hojalateada LigaMX; nos dejó un campeón, los Xoloitzcuintles de Tijuana, que borró del campo a mis amados Diablos Rojos del Toluca por un global de 4-1. Con tremendos jugadores al ataque como Duvier Riascos, Fidel Martínez y Alfredo Moreno, Fernando Arce en la contención y Javier Gandolfi como el líder de la defensa, el equipo que dirige genialmente Antonio Mohamed, fiel a aquel desenfado que marcó una época con Toros Neza, se consolidó como lo que fue, el mejor en todo el torneo.
De mi Toluca no puedo hablar demasiado en estos momentos, su torneo fue muy bueno, mucho más de lo que se esperaba al inicio del semestre, hay razones para estar contento; sin embargo, duele más cuando se llega tan lejos, la ilusión era muy grande y se está volviendo una mala costumbre perder una final en casa cada sexenio. El equipo venía deshaciéndose desde la semifinal contra el América; si a esto agregamos que el equipo salió fuera de sus tiempos, que los rivales le cerraron espacios y que la Bombonera no pesó como en los tiempos dorados, no había demasiado sobre qué construir épica futbolística.
No queda más que relamerse rápido las heridas para pensar en el siguiente torneo, que habrá otra oportunidad y Copa Libertadores; es necesario que el Toluca se refuerce aún más, porque es necesaria desde hace más de una década la trascendencia internacional, no sólo el ruido de las nueces. Se tiene a un gran grupo de jugadores y los nuevos elementos que llegaron para este año son bastante buenos, es cuestión que se amalgamen y que encuentren contundencia junto a otros más que deberán darle alternancia al equipo titular. Mientras en otros lares la ansiedad carcome a los aficionados y los proyectos de largo plazo terminan cortándose de tajo, en el Deportivo Toluca hay razones para seguir soñando.
*****
¡Gracias Rojo! Que la alegría no termine... (Notimex) |
Hay que admitir, más allá de si amamos u odiamos a los que administran el fútbol en México, que los pequeños cambios que se han hecho en el sistema de competencia de las liguillas de la LigaMX han sido para bien. Celebro como pocos el que se cuente el gol de visitante, razón que obliga a los que fueron los mejores equipos en el torneo regular a apretar el acelerador e imponer sus condiciones sin aferrarse al "empatito" de antes. El hecho de que a semifinales llegaron los cuatro mejores del torneo habla bien del torneo, pero no podemos permitir que sea flor de un invierno.
No es secreto que el sistema de competencia no ha tenido cambios lo suficientemente contundentes para dejar de premiar a la mediocridad; me refiero por supuesto al caso de las Chivas de Guadalajara, que pese a tener un torneo irregular, pudieron competir en la fase final. Debe haber alguna manera para que deje de haber tales premios inmerecidos, conciliando las cuestiones comerciales con los intereses deportivos; propongo una liguilla a la cual pasen directo los primeros dos lugares y los lugares 3 al 6 se eliminen, o un round robin donde compitan sólo seis equipos en un mini-torneo a ganar el mejor en visitas recíprocas. Otro caso aparte es el de la CopaMX, un torneo que llegó para quedarse, que ha dado relevancia a los equipos del AscensoMX y que también debe mejorar su sistema.
Otro de los temas a destacar, ya que tocamos las cuestiones comerciales, fue la emergencia de la televisión cerrada como difusora de los partidos del Club León, equipo donde tiene intereses económicos el ingeniero Carlos Slim. El hombre más rico de México ha decidido invertir en el deporte de las multitudes, lo cual significa un gran apuro para las dos televisoras que hasta hace poco poseían el duopolio de las transmisiones. La apertura de medios que Slim ha comenzado a insinuar en nuestro fútbol pudo tener consecuencias devastadoras para las televisoras de San Ángel y el Ajusco; por un momento, la ida de la Gran Final pudo ser en tele de paga. Salinas Pliego tiene muchas razones para agradecer al Campeón.
Finalmente, para dejar un pequeño sabor a controversia, soy un detractor absoluta de la pompa payasa con la cual los mercadólogos de la LigaMX han buscado investir al torneo; me refiero por supuesto a la ceremonia pre-partido, con su "himno de la LigaMX", el slogan y los niños que entregan los balones al inicio del juego; me sigue pareciendo un fusil barato de los protocolos europeos, por supuesto, sin el nivel de juego de por allá. Nunca entendí para qué sirvió el tan mentado "código de ética" si en diversas ocasiones fue aplicado a discreción, y si no me lo creen, pregúntenle a Daniel Guzmán, a Cuauhtémoc Blanco o al Chelís.
De todas maneras, no podremos esperar hasta que el Clausura 2013 toque a la puerta de los estadios del país. Por ahora, felicitemos a los Xolos y guardemos la corta espera. Adios!!!
Perdona que no te haya respondido. He tenido la cabeza en mil lugares al lado de la semana.
ResponderEliminarPor fin encuentro a alguien que está de acuerdo conmigo en eso de que las ceremonias pre-partido son estúpidas; mal marketing para algo que debe mejorar antes que nada en la cancha. Sobre el Toluca, espero el estirón el Libertadores, la última vez fue echado de fea manera por un equipo bananero colombiano.
Y sí, yo también extraño el fútbol de cada fin de semana, sobre todo cuando te das cuenta de que tu madre o tu hermana han secuestrado tu agenda. Saludos!!!