¡¡¡Feliz Año Nuevo 2013!!!

De nueva cuenta, un año más terminó; como la cuenta larga de los mayas no significó lo que muchos pensaban (el fin del mundo), seguiremos dando guerra como especie humana por un rato más. Por un lado, es muy bueno renovar esperanzas cada cierto tiempo, pero por otro lado, me desconcierta un poco el hecho de que estos "cortes de caja" se tengan que dar forzosamente a la par de los avatares del calendario. Para bien y para mal, el giro de la Tierra alrededor del Astro Rey es un recordatorio de que la vida puede parecer masiva, pero al mismo tiempo es un suspiro donde hay poco tiempo para realizar el plan infinito: ser feliz.

Aquí va un pequeño y vago recuento de mi 2012; la música puede esperar y no quiero que termine el año sin darle un abrazo a mis lectores.

*****

Como dice el término taurino, fue un toro difícil; este año fue demasiado existencial y complejo para mí, pero gracias a los designios de la fortuna, ha estado tomando un camino mejor. Por un lado, conocí a poca gente nueva, y éstas fueron demasiado pasajeras para el transcurso de mi vida; sin embargo, no he tenido quejas en relación a ello, ya que las pocas personas con las que he tenido contacto me han dado panoramas diferentes a los que yo tenía. Entre la amistad epistolar vía correo electrónico con D.B., los personajes que me han interesado por fines meramente literarios y las personas que forman parte de mi presente, tengo razones para agradecer.

El principal cambio en mi vida ha sido el trabajo, el cual me llegó cuando más lo necesitaba y en un momento perfecto, después de varias frustraciones e incertidumbres. Soy un hombre dichoso de tener a los jefes que tengo, quienes estuvieron dispuestos a darme la oportunidad de demostrar mis talentos; tengo la fortuna de estar rodeado de buenos compañeros con voluntad de enseñarme sobre el oficio de maestro. En este momento, mis alumnos son el motivo por el cual he disfrutado la miel y la hiel de este incipiente periodo de mi vida: tengo muchos conocimientos que ofrecerles, y en la misión de enseñárselos aprendo mucho más de ellos; finalmente la enseñanza siempre es un camino de dos vías. En estos meses, he aprendido que enseñar es como la canción de Fito Páez, "y te daré todo y me darás algo, algo que me alivie un poco más"; por supuesto, "Yo Vengo a Ofrecer Mi Corazón".

Por ahora, esa es mi situación laboral, la cual no pienso cambiar por el momento, al menos que esta vez sí entre a la Maestría y me vea en la necesidad de hacer un nuevo movimiento; espero tener buenas noticias para el mes de Febrero, ojalá se consolide la oportunidad de tener un lujo que pocos pueden tener hoy en día: dos trabajos. (Claveles y pleitesía para I. y P.)

*****

Mis padres están bien, mi hermana también, la familia tiene salud y los problemas que van surgiendo siempre se resuelven de a poco. Me da mucha alegría que la relación entre mi madre y mi hermana está mejor que nunca y que mis relaciones con mi círculo inmediato han mejorado con mi independencia. Cuando estuve desempleado, las tensiones eran muchas; si bien papá sigue me pagando pensión alimenticia, ya no tiene incertidumbre sobre mis planes y mis deseos. Sé que mis amigos están a mi lado, aunque sigamos guardándonos demasiada distancia por los rumbos de nuestras vidas; agradezco infinitamente su apoyo moral y su paciencia, aunque a veces las extraño, como es natural. Cuando salí del hoyo murakamiano en el que me quedé atorado más de lo deseado, sentí de nuevo la necesidad de cuidarlos y saber qué es de sus vidas; debo hacerme el propósito de no tener que echarlos de menos tan frecuentemente.

Los que me conocen saben cuál es la asignatura pendiente que siempre quiero cursar y no he tenido la oportunidad; el amor es un tema que veo con demasiada distancia, pero que no puede demorarse más en este instante preciso de mi existencia terrenal. Tengo la total disposición, como siempre, de conocer a tantas personas pueda; siempre habrá buenos amigos y conocidos entrañables en el camino, pero si tuviera un amor la caminata sería más dulce. Teniendo yo tantas canciones qué dedicar, tantos poemas qué leer en voz alta y tantos sueños qué gestar, quiero que todos tengan un destino más allá de mi propia trascendencia, alguien con quien compartir las cosas simples de la vida; la mujer que esté dispuesta a poner de cabeza mi vida se sacará la rifa del tigre, la única alternativa que me quedará será hacerla feliz.

*****

La pila de copias de mi alcoba sigue donde estaba hace un año, hay que depurar el closet y vender cosas que ya no me sirven; quiero aprender francés, tocar mi guitarra, regresar al gimnasio, contar nuevas historias y escribir otras 100 entradas de blog. Entrar a la Maestría en la UNAM apunta para ser mi principal objetivo, pero también tengo una novela a la mitad que deseo reanudar; hay muchas fiestas a las cuales quiero ir, conciertos que espero con ansia y tazas de café qué tomar en buena compañía. Si bien aún no he hecho una lista formal de propósitos, mi felicidad y mi realización como persona están a la cabeza de cualquier lista.

¿Y ustedes qué piensan?, ¿Cómo les pinta el año que viene? "El Arcangelino" les desea un exitoso y prometedor 2013.

¡¡¡Feliz Año Nuevo!!!